De un tiempo a esta parte se está detectando que las viviendas con más de 40 o 45 años se fabricaron con materiales que no aíslan correctamente del calor y del frío. Debido a ello, muchísimos edificios de la costa levantina, Murcia y otras localidades próximas al mar, se están viendo afectadas por humedades que, si no se tratan a tiempo, pueden devenir en problemas de humedades estructurales. La inmobiliaria Segohouse nos ha asegurado que la venta de viviendas de segunda mano ha caído considerablemente en estas zonas, sobre todo en edificios antiguos, debido a este problema, mientras que en zonas más secas, como su área de trabajo, la situación parece no haber mermado el interés de los compradores.
Las viviendas con humedades traen consigo enfermedades además de daños estructurales. Asma, alergias respiratorias, enfermedades crónicas respiratorias, reuma, agravamiento de enfermedades óseas, etc.
Hay ciertas localidades en las que luchar contra la humedad es toda una odisea, pero no es imposible. Empresas como Planit, arquitectos técnicos, se especializan en el control y eliminación de humedades mediante diagnóstico previo gratuito y posterior tratamiento contra humedades por condensación, humedades por capilaridad y humedades de filtración. No obstante, estos expertos nos han dado una serie de pautas que podemos seguir para luchar contra la aparición de humedades en nuestros hogares:
- Ventilar todos los días una media de 15 minutos cada habitación. Es fundamental que ventilemos lo suficiente las habitaciones con el fin de eliminar la humedad que se produce al estar cerradas, ducharnos e incluso por cocinar.
- Utilizar los extractores de la cocina y el baño. En España que haya extractor en la cocina es bastante lógico, pero no es muy común tenerlo dentro de los aseos. Sin embargo, eliminar muchísima humedad que, de otra manera, podría causar problemas.
- Utilizar absorbentes. Sobre todo hay que utilizarlos en los armarios o habitaciones con poca o mala ventilación.
- Calefacción controlada. Aunque no lo parezca, el aire caliente tiene incluso más humedad que el aire frío y por ende lo ideal es tratar de mantener una humedad constante mínima de 15 grados, de ese modo evitaremos la acumulación de humedad en paredes y ventanas. Lo mejor es mantener la temperatura de la habitación entre los 17 y 9 grados centígrados.
- Separa los muebles de la pared ya que si están totalmente pegados no habrá espacio para que haya suficiente ventilación y pueden aparecer manchas de humedad y moho.
- Tiende la ropa fuera de casa. No intentar secar tu ropa en habitaciones con tendederos portátiles, es mucho mejor tender la ropa en galerías o balcones que den al exterior para evitar que la humedad se quede dentro de la vivienda.
- Cuidado con las plantas, pues éstas tienden a provocar más humedad en la vivienda. Sin embargo, hay algunas que pueden ayudar justo a lo contrario, pues absorben la humedad. Estas son:
- Palma de bambú
- Ficus
- Yerbera
- Hiedra
- Crtistantemo
- Margaritas de floristería
- Lengua de Suega
- Cala blanca
- Dracaena Janet Craig
- Dracaena Warneckii
- Dracaena Marginata
Sal contra la humedad
A pesar de que es un truco bastante casero, la realidad es que la sal ayuda muchísimo a eliminar la humedad, ahora bien, debemos tener en cuenta varios factores para conseguir que esta solución funcione lo suficiente como para que notemos los resultados en casa. Hoy vamos a explicaros cómo hacer funcionar este truco para eliminar la humedad gracias a la sal.
Necesitarás: un recipiente plano y un kilo de sal gruesa.
Pasos a seguir:
- Coge el recipiente plano y llénalo con el kilogramo de sal gruesa. Ten en cuenta que cuando decimos recipiente plano nos referimos a que debe ser lo suficientemente ancho como para poder extender la sal, pero deberá tener un poco de fondo, no demasiado.
- Ubica el recipiente en la habitación donde desees eliminar la humedad y déjalo allí dos días.
- Tras el paso de 48 horas verás que la sal habrá absorbido gran parte de la humedad ambiental.
- Cuando la sal se ennegrezca esté muy mojada deberás cambiarla y poner un nuevo kilogramo de sal gruesa pues eso significará que ha llegado a su nivel máximo de absorción.
Los resultados suelen ser bastante favorables ya que este truco casero actúa de modo similar al de los aparatos antihumedad. Si la humedad persiste o aparecen manchas los mejor es contactar con un profesional.