Buscar
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Conoce los mejores aparatos para hacer Pilates.

El Pilates es un sistema de entrenamiento físico y mental que, entre otros beneficios, aumenta la fuerza muscular, la elasticidad y previene el dolor de espalda. Desde sus orígenes, para realizar determinados ejercicios es necesario disponer de unos aparatos determinados.

Como fabricantes de máquinas para Pilates, los técnicos de Ivem Pilates, una empresa valenciana referente en la fabricación de equipos para Pilates a nivel nacional, nos cuentan que las máquinas de Pilates han de ser precisas, versátiles y duraderas. En el diseño de estos aparatos intervienen activamente instructores de esta disciplina.

Existen diferentes tipos de Pilates. El Pilates de suelo, que se realiza sobre una colchoneta, el Pilates de agua, que se suele practicar dentro de una piscina y el Pilates de aparatos, en el que se utilizan máquinas especialmente diseñadas para realizar ejercicios concretos.

De los tres tipos de Pilates, el más efectivo y preciso es el Pilates de aparatos. La gran mayoría de estas máquinas fueron diseñadas por Joseph Humbertus Pilates, creador de este sistema, durante la primera mitad del siglo XX. Con el paso del tiempo, las máquinas de Pilates se ha ido modificando y perfeccionando.

Muchos gimnasios en los que se imparte Pilates suelen disponer de todos o gran parte de estos aparatos. También hay particulares, amantes de este modelo de gimnasia, que se montan su propio gimnasio de Pilates en casa.

En el Pilates, a diferencia del Fitness, es más importante hacer bien los ejercicios que la cantidad de repeticiones que se realizan. Como sucede con la gran mayoría de aparatos deportivos, en las máquinas de Pilates es fundamental la calidad. En el mercado puedes encontrar aparatos a distintos precios y con diferentes niveles de calidad, pero no todos ellos son igual de efectivos.

El origen del Pilates.

Dice National Geographic que el Pilates nació en un campo de prisioneros.

Joseph Humbertus Pilates fue un ciudadano alemán que, durante la Primera Guerra Mundial, cayó prisionero en manos del ejército británico. A las 24 horas de declararse el conflicto, el gobierno británico promulgó La ley de Restricciones de Extranjeros, por la cual, cualquier ciudadano alemán o austriaco que se encontrara en las islas británicas, en edad de integrarse al ejército, debía ser detenido de inmediato. En aquel momento, Joseph H. Pilates, estaba trabajando en un circo que se encontraba de gira por Inglaterra. Al ser apresado por el ejército, fue enviado a un campo de concentración habilitado en la Isla de Man, al norte de Irlanda.

Joseph H. Pilates había sido un niño enclenque y enfermizo. Padeció asma, raquitismo y fiebre reumática. En su afán por recuperarse y ser un niño normal, estudió su propio cuerpo y lo fortaleció a base de ejercicio. Tal fue su persistencia, que llegó a convertirse en Atleta. Trabajando como boxeador y contorsionista en diferentes en épocas de su vida.

En la Primera Guerra Mundial, a la Isla de Man, llegaron miles de soldados alemanes. La mayoría de ellos, tripulantes de submarinos y barcos de guerra. Los cuales habían sido apresados después de participar en encarnizadas batallas navales.

Humbertus Pilates desarrollo un sistema para mejorar la salud de los prisioneros maltrechos a través del ejercicio. Sobre las camas, montó sistemas de cuerdas y poleas que permitían ejercitar los músculos. A simple vista, parecían aparatos de tortura de la edad media. Milagrosamente, utilizándolos de manera adecuada, conseguían devolver la movilidad a los órganos dañados.

La Isla de Man fue para Humbertus Pilates un laboratorio. En el que puso en práctica muchos de los ejercicios tradicionales del Pilates y diseñó el prototipo de algunas máquinas como el Trapecio y el Reformador.

Terminada la guerra, Humbertos Pilates se marchó a Nueva York con su esposa Clara para enseñar su novedoso sistema de ejercicios que devolvía la salud a la gente y para prestar sus servicios de rehabilitación a los bailarines de Broadway. Los cuales, durante mucho tiempo, fueron sus principales clientes.

Las máquinas de Pilates más efectivas.

El blog Ibiza en Forma señala que son 4 los aparatos fundamentales del Pilates. Son estos:

  1. Reformer.

El Reformer es un banco con un asiento, en el que se sienta el usuario y que se mueve para delante y para atrás, por unos raíles. Está conectado en la parte de abajo a unas cuerdas elásticas o a unos muelles que ofrecen diferentes niveles de resistencia que permiten ejercitar la fuerza y la elasticidad.

El Reformer tradicional está construido en madera y acero, aunque existen versiones más ligeras y fáciles de trasportar, que no tienen patas y se colocan directamente sobre el suelo. Como si fuera una máquina de fitness para simular el remo.

En este aparato se pueden realizar diferentes ejercicios como el “Curl de Columna”, en el que el usurario va flexionando la columna vertebral moviendo el carro para delante y para atrás. En el ejercicio “Pierna en barra”, el gimnasta está sentado sobre el asiento, con los pies sujetos a una barra, extendiendo y flexionando las piernas, moviendo el carro contra la resistencia de las cuerdas. En el ejercicio “Stomach Massage”, el usuario está tumbado boca arriba, levantando la pelvis contra la resistencia.

Con este aparato se trabaja el abdomen, la cadera, las piernas, los glúteos, los brazos, los hombros, la espalda y se mejora la fuerza, la flexibilidad y la postura de la columna vertebral.

  • Cadillac.

También conocido como Trapecio, consiste en un banco, parecido a un banco de abdominales, sobre el que se colocan un conjunto de cuerdas y poleas para ejercitar diferentes partes del cuerpo. El origen de este aparato lo encontramos en los inventos que Humbertus Pilates ponía en marcha en las camas de los heridos en el campo de prisioneros de la Isla de Man.

Algunos de los ejercicios que se suelen realizar en este aparato son el “Pull-ups”, en el que el usuario se cuelga del trapecio, realizando movimientos para estirar los brazos y la espalda; “La elevación de Piernas”, en las que la persona, tumbada sobre el banco, utiliza las poleas para elevar las piernas y los brazos, trabajando de esta manera el abdomen, o “La flexión lateral”, en la que apoyándose en las cuerdas se realizan estiramientos para trabajar la cintura y los oblicuos.

Con el Cadillac se trabajan los abdominales, las piernas, los glúteos, los brazos, la espalda y se mejora la flexibilidad del cuerpo.

  • Las sillas de Pilates.

Aunque lleva un nombre genérico, en realidad este aparato lo inventó Humbertus Pilates a propósito para ayudar a la bailarina Kathy Grant para que se recuperara de sus lesiones en piernas y tobillos. Es como una silla, que cuenta con pedales sueltos conectados a muelles que se pueden quitar o poner para aumentar la resistencia. Dispone también de apoyos laterales que permiten subirse sobre el aparato para realizar diferentes ejercicios.

Las sillas de Pilates han sufrido diferentes variantes a lo largo de los años como la “Baby Chair”. Con la forma parecida a una sillita de bebé, tiene dos cuerdas en la parte de atrás que permite hacer estiramientos de espalda. O la “Electric Chair” que tiene dos barras laterales y otra en la parte de abajo para sujetar las piernas y una plancha de madera rígida en la espalda.

En la silla de Pilates se pueden hacer sentadillas, elevación de piernas, estiramientos de espalda o empujar con los pies la plataforma para trabajar la fuerza de las piernas.

Aunque en un principio este aparato fue diseñado para trabajar los músculos de las piernas, el diseño de determinados ejercicios permite fortalecer el abdomen, estirar la espalda o aumentar la fuerza en los brazos.

  • El Barril.

El barril es otro de los aparatos que nacieron en la Isla de Man. En un principio no era más que un barril de madera cortado por la mitad como si fuera un semicírculo, que permitía estirar sobre él la columna vertebral.

En versiones posteriores se le han añadido estructuras de barras fijas que permiten ejercitar la fuerza y la flexibilidad de brazos y piernas.

Características que deben tener las máquinas de Pilates.

Los aparatos de Pilates deben estar bien diseñados para poder realizar sobre ellos los ejercicios necesarios. De hecho, ha sido la necesidad de disponer de ciertos soportes para practicar determinados ejercicios, las que han dado pie al diseño de las máquinas, y no al revés.

Estos son algunos rasgos que deben cumplir los aparatos de Pilates para que sean efectivos:

  1. Se debe ajustar la resistencia.
  2. Debe ser versátil y adaptable.
  3. Debe ser una estructura estable y segura.
  4. Tiene que tener una construcción duradera.
  5. Debe ser fácil de ajustar.
  6. Tiene que tener un diseño ergonómico.
  7. Ha de ser compacta y fácil de almacenar.
  8. Debe incorporar todos los elementos, como barras, resortes y poleas.
  9. Debe ser adecuada para todos los niveles. Tanto para expertos como para iniciados.
  10. Ha de ser fácil de limpiar y mantener.

   La práctica del Pilates puede llegar a ser bastante beneficiosa para tu salud y para mantener un buen estado físico. Si practicas el Pilates de aparatos deberás disponer de las máquinas adecuadas para obtener  resultados óptimos.

Comparte este post:

Recibe nuestras mejores recetas y consejos de expertos directamente en tu bandeja de entrada.

Únete a más de 10.000 suscriptores

Al enviar este formulario, acepta nuestra política de privacidad.

También le puede interesar

Scroll al inicio